Detrás de los sacerdotes, entre
el pueblo, venían hombre y mujeres con sus niños y jóvenes, gente de guerra y
el resto de los Levitas que eran numerosos. La orden era que estos cuatro
sacerdotes que llevaban el Arca sobre sus hombros no se movieran del lugar
hasta que todo el pueblo pasara. ¿Cuánto tiempo podía durar la travesía? la
biblia no lo registra, solo que hasta que no paso el último israelita no
salieron los sacerdotes del agua. ¿Qué verdad espiritual contiene este pasaje
escriturar para nuestros tiempos actuales? ¡He aquí la respuesta a dicha
interrogante!. Cada uno de nosotros tiene un deber fundamental en el Señor, y
es; abrirle paso a nuestras futuras
generaciones para que ellos puedan entrar a la tierra que fluye leche y miel,
que es Cristo; como nuestra heredad. Tenemos la responsabilidad de heredarle
bendición a nuestros hijos, nietos, bisnietos y tataranietos; pero no solo es
eso, nuestro deber como Padres en el Señor es activar esas promesas bíblicas
para nuestros hijos a fin de que ellos puedan heredarlo a sus hijos y de este modo la antorcha del evangelio de Jesucristo estará encendida en nuestras
generaciones hasta que Cristo vuelva por su Iglesia. Dice la Biblia en Isaias 59:19 "Porque vendrá el enemigo como río, mas el Espíritu de Jehova levantara bandera contra él"” Todos hemos visto de manera personal o en documentales
el ímpetu de grandes ríos; y los destrozos que ese ímpetu puede causar,
arrasando todo lo que está a su paso. Lo que el Profeta estaba diciendo al
pueblo de Israel en ese momento era, que aunque Satanás viniera con ímpetu a causar
estragos en sus vidas el Espíritu Santo produciría una victoria en ellos que se
vería levantada como una bandera. Ahora bien; volviendo al pasaje de Josué
3:14-16 nos encontramos que lo único que impidió que esos sacerdotes fueran
arrastrados por el ímpetu del Jordán en
ese estado de desbordamiento fue el peso de la Presencia de Dios. Muchos dirán;
bueno es que el río se dividió y ellos estaban en seco, pero esto no aconteció
hasta que ellos estuvieron firmes dentro del agua. Si ellos no hubieran metido
sus pies a ese borde u orilla, el agua jamás se habría detenido como lo hizo de
lado a lado. Lo tremendo de un río crecido o desbordado es que las corrientes te alcanzan aun en sus
orillas y por ende basta con que metas tus pies en ellas para que te arrastre.
Es el peso de la presencia
del Espíritu Santo lo que no ha permitido que seamos arrastrados por todos los
males que el enemigo ha producido en nuestra contra. Es el peso de la
responsabilidad y del compromiso que tenemos con nuestras generaciones en el
Señor lo que debe prevalecer en nuestras vidas en cualquier circunstancia que
se presente. Nuestro llamado no ha sido en vano, los dones que el Señor nos ha
dado no han sido en vano, los hijos y nietos que el Señor ha dado a muchos no
ha sido en vano; es por causa de esas generaciones que aun permanecemos en pie.
Hay un relato en la Biblia que me
gusta mucho en el Libro Segundo de Reyes 7:3-8 que habla acerca de cuatro
hombres leprosos que, después de haber analizado su situación en Israel
decidieron activar el poder del acuerdo y se trasladaron al campamento del ejército
Sirio, el cual había sitiado a la ciudad israelita al punto de sumergirla en
una terrible hambruna. Pero lo que me gusta de este pasaje es que Dios permite
que cada paso que dan los cuatro hombres leprosos se conviertan en un tropel de caballos, con jinetes de
guerra que provocan un pánico tal en el campamento Sirio que huyeron
despavoridos dejando tooodas sus pertenencias, comidas, vestidos, y enseres..
Dios en este tiempo está trayendo este mismo caos al campamento enemigo solo
por cada paso que tú y yo damos en Fe, Obediencia y Amor al Señor y a su Obra. ¿Cuál obra? La
que Dios está haciendo en tu vida y en mi vida. ¿Quiénes eran los leprosos? Los
menospreciados en Israel; los que no encajaban en esa sociedad. Y aunque muchos
menosprecien tu llamado, tu servicio a Dios, y te menosprecien como persona;
¡no te preocupes! Dios hará que cada paso tuyo estremezca los cimientos del
infierno, y el enemigo tendrá que huir despavorido delante de la presencia del
Señor que mora en ti. Satanás en este tiempo esta asombrado, con sus dientes
rechinadores porque no puede entender ¿Cómo? A pesar de tantos ataques que te ha enviado,
de tantos conflictos que ha levantado en tu casa, en tu trabajo, y en tu
familia, aun; tú puedas seguir caminando
hacia delante en Fe. Y ¿sabes cuál es la respuesta a su interrogante? La
encontramos en el Libro de Hebreos 11:27 que dice: "Por la Fe Moisés salio de Egipto no temiendo la ira del Rey porque se sostuvo como viendo al invisible" Hebreos 10:39 “nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que tienen Fe para preservación del alma” Filipenses 4:13 “Todo lo podemos en Cristo que nos fortalece”. De modo que hoy más que nunca,
debemos darle valor al servicio sacerdotal que nos fue encomendado en esta
tierra. Hoy más que nunca debemos entender el
¿Por qué? el peso de su Presencia aun continúa en nosotros y sobre
nosotros. Hoy más que nunca debemos hacer vallado y evitar que el fuego del
infierno alcance a nuestras generaciones; aun las que no han nacido.
Mientras más nos ejercitemos en la presencia de Dios; mas
resistencia desarrollaremos para enfrentar y vencer a nuestros adversarios
espirituales.
Excelente...del Peso de Su Presencia Esta Saturada esta Entrada, Ana...Asi es: Vale la Pena Resistir como el Atleta!...Es Hora de que Cada Uno, Como Sacerdote del Altisimo, Honre su Oficio Sacerdotal y Tome el Arca, Tal Como Nos Anima El Espiritu a Traves de Ti, Resistamos en Medio de la Dificultad, Por la Generacion Que Ciertamente Debemos Impulsar a Ocupar Heredades Santas!! -
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