Usted tome un ovejo o una vaca y tráigalo al
matadero, pero sin atarlo. Le aseguro que lo podrá tener allí mucho tiempo
mientras este entretenido con alimento; pero en cuanto usted se acerque al
animal con intención de sacrificarlo, va a tener que correr muchísimo para
alcanzarlo, pues se espantara con tan solo su presencia.
Cuando Pablo hablo del sacrificio vivo, hizo alusión a la necesidad
de entregarlo todo aunque esto implique morir. Sacrificio vivo significa muerte voluntaria.
Sacrificio entre sus muchas
definiciones significa: ofrecimiento a
un Dios en señal de obediencia. Cuando
nosotros nos colocamos sobre el altar
como sacrificio vivo tenemos la opción de correr, huir de lugar cuando veamos
el cuchillo, o decirle al Señor ¡Hazlo!
Quita lo que tengas que quitar... y quizás en ese preciso instante el
Señor nos advierta: ¡Te va a doler! ; Pues bien, es en ese momento donde
debemos estar dispuesto a responder ¡No
importa que duela… solo quita de mi lo que está impidiendo que yo te ame mas.
Quita aquello que me está alejando de ti… solo quita de mi aquello que me puede
matar.!
Ser sacrificio vivo, voluntario implica
obediencia, entrega, disposición, y
responsabilidad.
Obediencia para aceptar la
voluntad de Dios, aunque no nos guste o no se adapte a nuestros intereses egoístas.
Entrega para morir por Amor a su propósito.
Disposición para entender lo que Dios está haciendo en nuestras vidas y ser sus
colaboradores. Responsabilidad para llevar a cabo la misión que se nos ha
encomendado con Veracidad y Excelencia.
Solo en nosotros esta la decisión
de; Matar lo que tenemos de Dios, lo que nos mantiene a su lado o Morir para permanecer
con él. Es nuestra elección.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Redacción: Ana Maria Melean
Diseño y Fotografía: Jesús Baldonedo